Un abatido, armas incautadas y un guardia infiel detenido
Agentes de Investigación de Delitos ya manejaban datos de que ocurriría el asalto.
La calma en la ciudad de Juan León Mallorquín se vio interrumpida el sábado último cuando un grupo de delincuentes llegó hasta la Distribuidora San Blas ubicada en el casco urbano, con intenciones de realizar un millonario asalto como lo hicieron días atrás en Ciudad del Este. El resultado fue un funcionario muerto, un delincuente abatido, armas incautadas y un guardia infiel detenido.
El objetivo del grupo era hacerse con la recaudación de la semana, según agentes del Departamento de Investigación de Delitos ya manejaban información sobre el posible asalto por lo que montaron guardia en el lugar, pero sin pedir apoyo a los agentes de la comisaría local.
Con la llegada de los asaltantes al local se inició el enfrentamiento, logrado acorralar a los malvivientes quienes no tuvieron más opción que improvisar una huida por el patio trasero de la propiedad, a través de una zona boscosa. Jaime Rodrigo Bobadilla Sánchez (25), empleado de la distribuidora, fue llevado por el grupo para utilizarlo de escudo pero fueron atacados por un enjambre de abejas, lo que provocó la muerte del joven a raíz de una reacción alérgica.
Además, el guardia del local, Rafael Ayala González, fue aprehendido por los intervinientes por presuntamente haber participado del atraco brindando informaciones sobre el movimiento de dinero en la empresa.
El automóvil en el que llegaron los asaltantes es de la marca Chevrolet Prisma, color negro, con chapa N° JBX-380, el cual fue robado en la ciudad de Curitiba, Brasil, fue abandonado en el lugar y de su interior se incautó un subfusil, vainillas percutidas, una caja de fósforo, combustible y clavos miguelito.
Los uniformados realizaron un rastrillaje por varias horas en el lugar y entrada la noche, lograron abatir a Benicio Paredes Ramírez, alias “Tapiti”, quien posee varios antecedentes por robo, hurto y homicidio. De su poder se incautó un fusil M-4, propiedad de la Armada Paraguay, robada en noviembre pasado de un sub oficial en orillas del Paraná.
El fiscal del caso, Miguel Ángel Alvarenga, aun no quiso precisar muchos datos sobre la investigación pero sí se confirmó que se trata del mismo grupo que días atrás robó G. 1.120 millones de la distribuidora Atlantic SA, ubicado en el Km 12 Acaray de Ciudad del Este. En la semana uno de los miembros del grupo fue detenido durante un allanamiento.
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