Hurtan notebook de cirujano en el Sanatorio Internacional
Computadora estaba en su consultorio. Todo quedó grabado por el circuito cerrado.
Un ginecobstetra fue víctima del hurto de su computadora dentro de un sanatorio privado de Ciudad Del Este. El hecho ocurrió el viernes, poco después de las 14:00. El propietario ofrece recompensa para recuperar su equipo, pues dentro había documentos muy delicados.
La víctima es el Dr. Cristian Sosa, especializado en ginecobstetricia, perinatologo y cirujano fetal en el Sanatorio Internacional, de donde volvieron a hurtar en un consultorio.
Sosa salió al medio día de su consultorio para ir a almorzar en su domicilio. Según las imágenes del circuito cerrado, el autor del robo estuvo por 10 minutos aproximadamente en frente a su sala y aprovechó el momento en que la secretaria dejó el piso por unos minutos, pues fue a esterilizar los instrumentales del doctor.
El mal viviente ingresó al consultorio y se apoderó de la notebook de la marca Acer, de color negro, de 15", la cual tenía hace tres años. Lo que más lamenta el cirujano son los archivos con los que cuenta en su computadora, pues allí están sus trabajos científicos, tesis, historial médico de sus pacientes y otras informaciones de vital importancia para los tratamientos.
El autor fue grabado por las cámaras del circuito cerrado, por lo que piden ayuda a la ciudadanía para recuperar el equipo informático. Sosa manifestó que ofrecen recompensa por el equipo. "Daremos unos días a ver si aparece, sino, el lunes vamos a llevar todas las imágenes y vídeos que tenemos a la fiscalía. Queremos dar chace a ver si devuelve, así no hacemos nada", refirió el doctor.
Cualquier información sobre el equipo pueden comunicarlo al (0973) 593-355 o en recepción del hospital.
SEGUNDO HURTO EN EL AÑO
Este es el segundo hurto de notebook ocurrido en el interior del Sanatorio Internacional, pues el 17 de julio habían ingresado al consultorio de una nutricionista, de donde se llevaron una computadora portátil de la marca HP, Gs. 300.000 y algunas facturas. En aquella oportunidad no habían contado con las imágenes del circuito cerrado, por lo que nunca se pudo recuperar el equipo.
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