Turista niega ser el que golpeó a la trabajadora
Motivo de la gresca se dio luego del reclamo de la venta de perfumes falsificados.
Ante la versión de que supuestamente el turista brasileño Ricardo Reis Castro había iniciado la agresión contra Natalia Pilonetto, propietaria de la tienda Elegancia By París donde se produjo el conflicto entre ambos, el ciudadano extranjero salió al paso y negó tal versión, mencionando que en todo momento solo intentó recuperar su teléfono celular que estaba en manos de Natalia.
En conversación con nuestra redacción, Castro explicó que fue a comprar perfumes y cremas de la tienda en cuestión, pero a raíz del atraso no pudo verificarlos, pues debía asistir a una presentación musical en Foz do Iguaçu. Ya en su hotel, al verificar los productos se percató de que eran falsificados, por lo que al día siguiente volvió hasta el local mencionado.
El turista reafirmó su versión de que fue a reclamar que le vendieron un producto falsificado como original, contradiciendo a lo manifestado por Pilonetto, quien dijo que quería devolver la mercadería que estaba rota.
Las imágenes del circuito cerrado que fueron difundidas en las redes sociales muestran el momento en que Pilonetto despoja al brasileño de su teléfono celular. Según el turista, una vez en la tienda y no teniendo respuestas ni solución a su reclamo, sacó su teléfono con intenciones de tomar fotografías del código de barras de las mercaderías y de la factura.
Tras insistir para que le devuelva su aparato y la negativa de la mujer, se abalanzó contra el mostrador e intentó recuperarlo, ante la supuesta amenaza de que lo romperían. "En todo momento me fui por el celular, no le pegué ni nada de eso a ella", explicó Castro.
HEMATOMAS Y ROPA ROTA
Pilonetto había quedado con varios hematomas y parte de la ropa rota luego de todo el episodio, afirmando que fue durante el forcejeo con el extranjero. Esta versión también fue negada por Castro, quien expresó que fue durante otro forcejeo con su esposa, luego de que esta reclamó nuevamente la factura del producto, produciéndose allí los moretones de la propietaria de la tienda.
Esta versión fue también negada por Pilonetto, quien asegura que la esposa de Castro no se metió en la gresca en ningún momento. Al momento de solicitar las imágenes del circuito cerrado que muestran la continuidad de la gresca, manifestaron que las grabaciones ya están en poder del Ministerio Público.
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