Mantuvieron como rehenes a la dueña de casa y a sus tres hijos, Jorge Daniel Amarilla, de 18 años, y dos niñas, de 13 y 5 años de edad.

El Ministerio Público, representado por el fiscal Luis Trinidad Colmán, obtuvo la condena de dos asaltantes, quienes fueron sentenciados a 15 y 13 años de pena privativa de libertad por robo agravado con toma de rehenes. El juicio oral y público concluyó este 6 de abril en el Poder Judicial de Ciudad del Este. 

Los condenados están identificados como Alexis Marcos Alcides Riveros y Jorge Daniel Leite Delgado.  El primero de ellos recibió la sanción más alta, según se dio a conocer durante el debate público.

De acuerdo con antecedentes, los hechos ocurrieron el 26 de noviembre de 2019, a la 01:30 horas aproximadamente, en una vivienda ubicada en el km 20 Monday, a unos 700 metros de la Ruta Nº 2 del distrito de Minga Guazú.  En aquel entonces, los criminales tomaron por asalto la vivienda de Flavia Bogado Ozuna y mantuvieron como rehenes a ella y a sus tres hijos, Jorge Daniel Amarilla, de 18 años, y dos niñas, de 13 y 5 años de edad.

Vecinos sospecharon que algo raro sucedía en la casa, por lo que alertaron a las autoridades. Seguidamente, miembros de la fuerza pública de distintas reparticiones, encabezados por el entonces fiscal de turno, Alcides Giménez, llegaron al lugar y comenzaron las negociaciones para la liberación de los afectados.

Primeramente, los criminales liberaron al joven de 18 años y le exigieron que ponga su vehículo a disposición para el escape. Luego, liberaron a las dos niñas, de 13 y 5 años. A cambio, exigieron la provisión de chalecos antibalas para su fuga.

En un momento dado, uno de los delincuentes realizó disparo hacia el lugar en que estaban los intervinientes y abordaron el vehículo, uno subió en el volante y otro en el asiento trasero y trataron de llevar a la fuerza a Flavia Bogado. El fiscal Giménez les reclamó que ese fue el trato, hasta que la mujer aprovechó y en un descuido forcejeó con uno de ellos y consiguió escapar de sus atacantes.

Los delincuentes huyeron del lugar a bordo de un automóvil Toyota Allion, propiedad de Jorge Amarilla, además robaron la suma de 2 millones de guaraníes y dos teléfonos celulares del lugar. Los mismos cubrieron su huida con disparos de arma de fuego. Al día siguiente, el vehículo en cuestión fue encontrado abandonado.

Posteriormente, fueron aprehendidos los autores del atraco, siendo procesados y finalmente condenados a 15 y 13 años de pena privativa de libertad. El Tribunal que dictó la sentencia estuvo presidido por la juez Flavia Lorena Recalde y conformado por sus pares Milciades Ovelar y Alba Meza.